Volver por mas

                                          Por Pilar Altilio

          El encuentro es un aspecto de la condición humana que indica        necesariamente un acuerdo.

Una reunión hacia un fin.  A veces fortuito, otras logrado sobre la base de una estrategia, tiene la posibilidad de facilitar el intercambio, plantear ideas, mostrar otros modos de convivencia y desenvolvimiento grupal.  Tiene un plus en nuestro tiempo, donde las acciones grupales escasean y las individuales son lo corriente.

El grabado viene registrando un cambio considerable dentro del panorama creativo.  Sin embargo en nuestro país tiene tradición desde la década del '30 con el grabado social, la vertiente de artistas como Spilimbergo que arman una obra más intimista y seriada en esta técnica, hasta la oleada de los '60 y 70 con la renovación de Bemi y la aparición del Arte Correo.  Pero es desde la década del '80, donde esta técnica milenaria, ha conseguido posicionarse como protagonista, a partir de la investigación, la renovación técnica, la experimentación con nuevos materiales, la inclusión de las últimas tecnologías y la aceptación total del grabado en tridimensión, con el objeto grabado.

Todo esto indica claramente no sólo la  potencionalidad que como técnica tiene, sino la valiosa virtud de adaptarse a los tiempos de la reproductibilidad de la imagen.  Manejando como propia la serie, la variación, el despliegue de posibilidades, se muestra más dúctil y más contemporánea en relación a las técnicas tradicionales y tiene cada vez más artistas trabajando activamente.

Celebramos que se produzca en la Escuela de Artes Visuales este encuentro, por lo que  sígnifica  ser anfitriones, por lo que posibilita entre la comunidad educativa y los artistas invitados, que renovarán los ánimos y desarrollaran sus técnicas en talleres. Celebramos también que estos esfuerzos no se pospongan, aún en los tiempos que corren.

Bienvenidos